Desempleo en el campo disciplinario

Mercado Laboral en las Ciencias de la Información Documental

 

1.      Situación general de desempleo

La situación de empleabilidad en México es grave, en los últimos años no basta con tener una formación profesional ya que el mercado laboral cada vez es más exigente en el sentido de la actualización, habilidades y competencias para adaptarse al contexto, además de la innovación y la capacidad para resolver problemas.

Aunado a lo anterior, debemos considerar que la demanda de empleo es mayor, egresan demasiados universitarios, ingenieros, técnicos y las opciones para laborar son pocas o en situaciones no muy afortunadas.

De acuerdo a una emisión de CNNExpansión, las cifras sobre empelabilidad en México son las siguientes:

 

 

 

 

 

 

 

 

 

2.      Mercado laboral de los profesionales de la información

 

Para conocer la situación de los profesionales de Información se han realizado diversos estudios, principalmente en los países en que estas áreas del conocimiento son más reconocidas, como los países europeos o norteamericanos. En cuanto a México nos enfrentamos al problema que no han realizado las investigaciones al respecto, resulta un poco difícil por la falta de reconocimiento que tiene nuestra profesion. El resto de los países latinoamericanos cuenta aún con más información.

El principal estudio internacional referente fue realizado por la extinta Federación Internacional de Documentación en 1997 (FID, 1997), que llegó a recoger 2618 cuestionarios. Según el resumen de Tejada y Rodríguez Yunta (2003), destacaba ya problemas como la reducción de recursos, la desintermediación, la globalización y el auge de las tecnologías. (Merlo, 2011:19)

Haremos referencia a algunas investigaciones que se han realizado para explicar la situaciòn del Mercado Laboral que enfrenta el profesional de la información

Una tónica general que aparece con frecuencia en los estudios analizados, es que los profesionales de la documentación se han considerado casi siempre disconformes con su situación, incluyendo en ello su estatus en sus organizaciones, remuneración, reconocimiento social e interprofesional. Este malestar explica la abundancia de estudios sobre alguno o varios aspectos relativos a condiciones laborales y de reconocimiento social. (Merlo, 2011:18)

 

En cambio, un aspecto positivo es el que explica María del Carmen Negrete respecto a un estudio realizado en la UNAM, en donde:

Casi la mitad de los encuestados opinaron que hay menos dificultades de acceso laboral que en otras profesiones. Esta situación puede estar relacionada con la inserción temprana en el mercado laboral que tienen los estudiantes en su etapa de formación. Esta práctica hace que el empleador se relacione tempranamente con el quehacer del bibliotecólogo y se cree una imagen positiva de la profesión y su desempeño; no obstante, significa una mayor responsabilidad y supervisión por parte del docente, quien debe garantizar el nivel profesional del trabajo que realicen los estudiantes. También la garantía de obtener un título profesional con dos años y medio de formación facilita la inserción temprana en el mercado laboral. (Negrete, 1992: 69)

 

La visión del mercado laboral es bastante limitada, unicamente se relaciona a instituciones tradiciones como bibliotecas, archivos y en menor grado museos. Nuestros conocimientos no son lo suficientmeente valorados, al grado de que los empleadores quieren satisfacer esas actividades con practicantes o prestadores de servicio social ya que implica un ahorro economico aunque éstos carezcan de la formación necesaria.

Presentamos dos gráficas basadas en el Estudio Nacional de Sueldos y Rotación de Empleo en el Sector TI, en donde se muestra que el sector en Tecnologìas de la Informaicón se concetra mayormetne en la zona centro del país, si embargo, los profesionales de la información de este espectro, no tenemos un impacto en algo que nos compete.

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Un estudio más presentado  en 2011 en  la tesis La imagen profesional del bibliotecólogo en el ámbito laboral, nos lleva a reflexionar sobre varios puntos, siendo que en este estudio se concluyó que los requisitos de contratación fueron mayormente la experiencia, en segundo lugar las propuestas otorgadas por el sindicato o recomendaciones de conocidos, propiciando que no se contraten a los profesionales. El sector educativo es el que más ocupa a los profesionales de la información y en su mayoría ejerce en el sector privado con un salario de 3,0000 a 6,000 pesos mensuales, lo hacen como titulares de área o auxiliares pero realizando actividades generales de toda la institución y muchas veces con una jornada laboral de más de 8 horas. A pesar de las condiciones e imprecisiones existe una alta satisfacción laboral. Sumado al anterior, tenemos la tesis de Isachar Villa, titulada Seguimiento de egresadas de la Licenciatura en Bibliotecología: Generación 2000-2004, en donde es se hace un estudio específico a mujeres, algunas de ellas no laboran en el área y las que lo hacen, en su mayoría en el sector privado; además de que continuaron con su formación académica a través de cursos especializados que y menor grado en maestría; finalmente en cuanto a la satisfacción con el plan de estudios que ofrece la licenciatura se encontraron medianamente satisfechas.

El último estudio analizado es el enfocado al Colegio de Bibliotecologìa y Ciencias de la Información de la Universidad Autónoma de Nuevo León, titulado La Bibliotecología en la enseñanza y la práctica: diferencias entre el aula y el trabajo, en donde se ve que la mayoría de los que eligieron la carrera s por el campo laboral que ofrece, las materias que más se reflejan en el ejercicio de la profesión son Consulta, Clasificación y Catalogación, sin embargo no hay una correspondencia entre el plan de estudios y el campo laboral.

Con los estudios analizados es posible ver que las maneras de acceder a un empleo no necesariamente son los conocimientos, el salario no es el deseable y nuestros conocimientos no son totalmente ejercidos, a pesar de ello los profesionales están satisfechos con las posibilidades de mejora laboral. Una situación preocupante es que los planes de estudio en el área no están cubriendo los requerimientos del campo laborar y por ello es necesario la especialización o bien, la experiencia que es a más largo plazo; también, a pesar de que el campo más amplio es el sector público, nos damos cuenta que estamos abarcando más el sector privado, porque el Estado no está preocupado en tener en las instituciones documentales a personal capacitado para tales tareas.

Una razón muy importante y que tiene que ver con la economía de las naciones es que el Estado no invierte en las instituciones culturales porque estas no aportan al Producto Interno Bruto (PIB), generan otros tipo de ventajas y ganancias, pero que al sistema capitalista implantado en varios países no le son de utilidad, de esto también viene que las tecnologías tengan un impacto en la economía, luego entonces, las competencias informáticas son sobrevaloradas en cuanto a las informacionales.

Muchas de las problemáticas expuestas se basan en la falta de reconocimiento social de los profesionales de la información, en el contexto actual hay necesidades imprescindibles antes que satisfacer una necesidad informativa de manera objetiva, entonces se cree que nuestros conocimientos no son necesarios y se puede carecer de ellos en las instituciones o en la sociedad.

Para concluir con este capítulo  el mercado laboral en las Ciencias de la Información Documental hacemos referencia al texto titulado Estudio sobre los profesionales de la información: prospectiva de una profesión en constante evolución, realizado por la Federación Española de Sociedades de Archivística, Biblioteconomía, Documentación y Museística.

a) Problemas relacionados con el contexto socioeconómico
·         Las políticas de reducción del sector público pueden llevar a recortes que supongan un retroceso en las políticas bibliotecarias de modernización, de ser centro social y cultural, y espacio de aprendizaje ·         El desconocimiento social de la profesión y de las instituciones documentales, incluyendo empleadores y administración. Invisibilidad ·         El predominio de los enfoques neoliberales y de la rentabilidad a corto plazo que convierte en inviables los servicios que generan capital social intangible a medio o largo plazo (cultura, aprendizaje permanente) ·         Como consecuencia de la crisis económica, pueden desaparecer servicios o reducirse peligrosamente la calidad de algunos servicios
b) Relacionados con los propios profesionales	c) Problemas relacionados con los usuarios
·         La falta de proactividad en la detección y ocupación de nuevos nichos de trabajo (workflow, administración electrónica, arquitectura de la información, gestión de contenidos, documentación electrónica, digitalización, conservación, autenticación, plataformas web para formación, edición digital, posicionamiento web, validación de fuentes, conservación de documentos digitales…) ·         La autoexclusión de los propios profesionales por inmovilismo, incapacidad para evolucionar y atender las demandas sociales de información. No atender a la prioridad de facilitar el acceso, la generación y la gestión de conocimiento y la información ·         Los planes de estudio no aciertan a formar para abrir nuevas vías laborales a los graduados ·	·         El análisis de la demanda es insuficiente. Conocemos de forma muy imprecisa y deficiente las necesidades de información de usuarios y sobre todo de los no usuarios ·         La googlelización, los nuevos hábitos de consumo de información, no benefician la oferta de las instituciones y sus profesionales, que no puede tener siempre la misma inmediatez. Esta falsa autonomía puede llevar a considerarnos superfluos, a que los usuarios por sepan quién hay al otro lado y gestiona ·         La sobrevaloración de las competencias informáticas frente a las informacionales, desequilibrando la capacitación ciudadana en la sociedad digital ·         El espejismo tecnológico, la desintermediación del acceso a la información. Creer que todo está en Internet o en Google hace superfluas las instituciones dedicadas a contener o transferir información.

Según el mismo estudio de la FESABID, los principales riesgos a afrontar son:

·         Un perfil profesional con tendencia a la endogamia, a “cerrarse” en su espacio y en su ámbito de trabajo, poco proclive a la cooperación con  profesionales o entidades afines ·         El conformismo ante el cambio, complacencia o conformismo ante el cambio y la incertidumbre ·         Una hipervaloración de la tecnología y las herramientas por encima de los usuarios y las organizaciones ·         La formación deficiente, desfasada o  no adecuada al mercado y la demanda de las organizaciones ·         El encastillamiento en valores “clásicos”, actuar a la defensiva contra un entorno de cultura visual/audiovisual ·         Un seguimiento acrítico de modas tecnológicas sin análisis de coste-beneficio, sin analizar características de lo que ha de ser o no una ventana de oportunidad ·         La poca visibilidad de la profesión y del servicio, falta de apoyo institucional ·         La desintermediación ante los usuarios, distancia con los usuarios reales a medio plazo

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

2.1.Prospectiva del mercado laboral

Violeta Gibaja hace referencia a las nuevas áreas de ejercicio de los profesionales de la información, dado que en las últimas décadas los cambios han propiciado que nuestras actividades sean más variadas, pero también más especializadas:

Términos como gerente del conocimiento, jefe ejecutivo de información, desarrollador web, broker de información, unidad de inteligencia competitiva, departamento de intranet, arquitecto de información, son neologismos posteriores a la definición de los años sesenta de Borko. No obstante, describen profesiones, puestos de trabajo y divisiones organizacionales interdisciplinarias, dedicadas al estudio de las propiedades y del comportamiento de la información, y de las fuerzas que gobiernan su flujo. Las oportunidades laborales cambian pero el objeto de estudio de la Ciencia de la Información permanece. (Gibaja, 2013:58)

A estas palabras sumamos otra postura relacionada:

En palabras de Wolton (2000), los dos tipos de mediadores fundamentales de la información y el conocimiento de este nuevo siglo serán por un lado los bibliotecólogos, archivólogos y documentalistas, y por el otro los periodistas, porque estos profesionales trabajan con los dos tipos de información más importantes que fluyen en estos momentos por los diferentes puntos de la Red que requieren organización, sistematicidad y articulación: la denominada información–conocimiento y la información–noticia. (Pirela: 2005)

Cabe resaltar que ante la oleada de cambios, muchos profesionales y expertos en el área se han dado a la tarea de plantear soluciones que el contexto exige, en este sentido: Además de las competencias que ya contamos como profesionales, debemos trabajar en las enfocadas al contexto actual.

El colectivo de profesionales de la información y la documentación, que muchas veces ha transmitido una sensación de victimismo y una cierta invisibilidad social, actualmente intenta ser reivindicativo, dispone de una completa oferta formativa, lo que hace que la profesión esté en su mejor momento de especialización y, además, parte de una demostrada base vocacional. Existen titulaciones universitarias de grado y de posgrado para la formación, se realizan investigaciones doctorales, se dispone de mejores bibliotecas y archivos que nunca, se prestan muchísimos servicios presenciales y en las redes, por lo que el enfoque global no debe ser pesimista. (Merlo, 2011:19)

En este sentido, algunas de esas "nuevas" competencias (conocimientos, habilidades, destrezas y actitudes) que deben desarrollar los profesionales de la información giran en torno a la comunicación–mediación de la información y su impacto en el enriquecimiento cognitivo del individuo y la sociedad, para lo cual hay que asimilar conocimientos teórico–prácticos, integrarlos y/o vincularlos con otros campos del saber, además de aplicar métodos de investigación para generar su propio conocimiento. (Benitez y Miranda, 2002).

A las características académicas y de conocimientos en el área es preciso que consideremos la importancia que tenemos en la sociedad, en el sentido de que también somos promotores de la cultura y que nuestra tarea es totalmente necesaria para contrarrestar los problemas sociales actuales, y como lo menciona Pirela:

Junto a estas competencias de carácter teórico–conceptual y práctico, se proponen otras más de carácter actitudinal y de nuevas características personales para ejercer la profesión, entre las que se mencionan el compromiso personal–social para con la organización donde se trabaja y para con los usuarios; el liderazgo, la cooperación y la facilidad de comunicación e interacción con otros, lo cual facilita el trabajo en equipos multi y transdisciplinarios; y la actitud de investigación y actualización permanente, que concibe el acto investigativo como una estrategia fundamental para enriquecer su acción en diversos ámbitos de trabajo y le permite su propio conocimiento (Pirela, 2005)

 

En cuanto a la perspectiva que debemos enfrentar ya se tienen algunos avances que son reflexionados en el mismo estudio del FESABID

a)      Aspectos clave de avance relacionados con actitudes profesionales.
·         Salir del aislamiento, colaborar con otros colectivos ajenos a la profesión. Cooperación y capacidad de integración en proyectos y grupos multidisciplinares de actividad, internos y externos ·         Anticipación, visión de futuro, innovación, investigación,  creatividad, imaginación, proactividad, inquietud, curiosidad por lo nuevo, búsqueda continua de mejoras... ·         Transversalidad con otras profesiones y actividades ·         Abandono del papel pasivo y de las funciones “clásicas” de la profesión. Dinamización de funciones y versatilidad ·         Incorporación a las tecnologías ·         Actitud flexible, mente abierta y predisposición a  los cambios y a abrir nuevos frentes, sin miedo a “morir de éxito” ·         Rendir cuentas, mostrar evidencias, difundir indicadores de éxito, grados de adecuación a las necesidades de los usuarios, y hacerlo a través de cualquier canal ·         Fortaleza en difundir servicios y habilidades, comunicar dentro y fuera de la organización ·         Definición de perfiles profesionales, capacidad para dar  visibilidad a los mismos y sus ventajas, y adecuada política de contratación ·         Internacionalización
b)     Aspectos clave de avance relacionados con la formación	c)      Aspectos clave de avance relacionados con la prestación de los servicios
·         Adquisición de más habilidades y conocimientos en informática, gestión de proyectos y empresas y análisis para la toma de decisiones, interactuando con otros profesionales ·         Equilibrio entre los contenidos docentes de formación universitaria y la práctica profesional ·         A medio/largo plazo, elevar el nivel de la enseñanza. Graduados más competentes, más preparados y que se asocie esta titulación a profesionales con prestigio ·         La adecuada formación competencial y la capacitación profesional reglada y no reglada ·         Continúa alerta formativa e informativa. Seguimiento de los avances en sistemas de información	·         Conocimiento de las necesidades reales de sus comunidades de usuarios y capacidad de reacción ·         Adaptación a los recursos de información digital, Visibilidad en la red ·         Dar servicios modélicos y valiosos para usuarios y organizaciones: Ser útiles y demostrarlo ·         Plena disponibilidad para comprender y afrontar cualquier cambio que lleve a mejorar el servicio público bibliotecario ·         Ofrecer alternativas realistas y efectivas que mejoren la situación con respecto al acceso a la información ·         Política decidida de difusión de los servicios de los centros de información para cambiar la percepción que tienen los usuarios y la sociedad ·         Conocimiento de la percepción que tienen los usuarios de nuestros servicios

 

Lo expuesto a lo largo del presente trabajo, es un análisis del contexto al que nos enfrentamos como profesionales, específicamente de la información y efectivamente, el compromiso más grande e importante es el de nosotros mismos empezando por valorar lo que somos y hacemos con todas las posibilidades que tenemos de acuerdo a nuestros conocimientos, herramientas y métodos.

Violeta Gibaja se refiere a las posibilidades que tenemos como profesionales de la información, valorando nuestras capacidades de acuerdo a nuestros conocimientos:

Los profesionales de la información tienen las habilidades necesarias para colaborar en la gestión del conocimiento de las organizaciones, participar en procesos de inteligencia competitiva y trabajar en forma interdisciplinaria en el diseño de sistemas de información, entre otras actividades. Sus competencias y su experiencia les permiten aportar un valor agregado al proceso de toma de decisiones de las empresas. (Gibaja, 2013:50-51)

 

 

 

3.      Conclusiones

El mercado laboral en las Ciencias de la Información Documental cada vez es más amplio, sin embargo la visión es limitada por las situaciones que se discutieron en el texto como la falta de reconocimiento social y por ende la falsa creencia de que somos innecesarios en las instituciones o nuestras tareas se pueden cubrir con un practicante.

Es necesaria la colaboración con otras ciencias y técnicas pero sin someternos a ellas, los nuevos campos de acción exigen que nos actualicemos, contemos con conocimientos de otras áreas y participemos de los procesos actuales.

Profesionales y expertos coinciden en las carencias de la formación universitaria y en el bajo nivel de eficiencia de las asociaciones profesionales que nos integran. La formación generalista en una profesión tan en cambio y con tantas subespecialidades muestra dificultades para ser completa y satisfactoria para todos los sectores, a jugar por los resultados de ambos estudios de opinión. (Merlo, 2011:88)

 

Así también nuestro ejercicio en la sociedad es imprescindible, las funciones que llevamos a cabo tienen un impacto colectivo y muchas veces relacionado con el patrimonio cultural de la sociedad y por ello la importancia de ejercer esas funciones con profesionalismo y que lo que hacemos sea valorado por todos los sectores.

Para finalizar, valdría la pena preguntarse las cuestiones expuestas por Violeta Gibaja respecto a cuestiones que influyen en el mercado laboral de los bibliotecarios, que bien se aplican a todos los profesionales de la información

En este contexto cabe preguntarse si los bibliotecólogos son conscientes de su potencial como gestores de la información y del conocimiento, si los docentes y los planes de estudio transmiten este nuevo abanico de oportunidades, y si los actores del mercado laboral conocen las competencias de los profesionales de la información más allá del estereotipo del bibliotecario tradicional. (Gibaja, 2013:51)

 

 

 

 

 

 

 

Anexamos un cuatro que hace referencia al texto mencionado sobre las oportunidades que tenemos como profesionales

a) Oportunidades por la evolución de las necesidades de los usuarios o clientes	b) Oportunidades por las necesidades de las organizaciones y la Administración
·         La universalización en el uso de las tecnologías de la información amplía la posibilidad de ofrecer servicios, difundir información a grupos más amplios, heterogéneos y preparados. Estar conectados permanentemente incrementa el acceso y consumo de servicios de información ·         El mayor nivel de exigencia de la información y servicios requerirá más calidad en nuestra oferta de contenidos y servicios ·         La cada vez mayor percepción social del incremento, diversificación y sobrecarga de información y contenidos revaloriza los servicios profesionales fiables de filtrado, selección, orientación, agregación y conexión desde una perspectiva centrada en el usuario ·         La movilidad, el acceso a información relevante desde cualquier lugar y dispositivo y de manera inmediata favorece el uso de los servicios. Más usuarios tendrán nuevos dispositivos de acceso a la información cada vez más sencillos y asequibles ·         Se consolida el concepto de información frente al de documento, lo que permite aproximar la profesión a las necesidades de un mayor espectro de población	·        La necesidad de organizaciones más eficientes: El aumento de la información y los contenidos digitales ·        Las demandas de la administración electrónica en distintos ámbitos: salud, educación, gestión ·        El entorno digital de las empresas y la administración requiere nuevos servicios y diversifica el ámbito de la gestión de la información       c)      Oportunidades relacionadas con la cooperación interprofesional     ·         La existencia de nuevas formas colaborativas de creación de conocimiento permite alentar y gestionar la generación de conocimiento en grupo y en red ·         La cooperación con profesionales de diversas disciplinas como informáticos, docentes, pedagogos, para formar grupos de trabajo interdisciplinares. Se debilitan las  fronteras entre profesiones dedicadas a gestión de información
d) Oportunidades por el contexto social
·         La situación de cambio social puede llevar a una redefinición del papel de los servicios de información y de la profesión ·         Es posible aplicar tecnologías que ya existen fuera del mundo de nuestras instituciones para simplificar nuestros sistemas de búsqueda y el acceso a la información ·         La convicción de que las bibliotecas pueden contribuir en el acceso igualitario y la reducción de la exclusión de la sociedad del conocimiento, contribuyendo a la integración, inclusión y desarrollo social y cultural
d)     Oportunidades por la implantación y mejora de servicios y atención a colectivos
·         La consideración de las bibliotecas como un servicio de proximidad, polivalente y confortable de acceso a la cultura, la información y el ocio, que favorece la inclusión social, digital y económica y posibilita una relación social real y no solo virtual ·         La personalización de los servicios web y presenciales cobra gran importancia. Podemos adaptar los servicios, procesos y aplicaciones a la perspectiva de los usuarios ·         La creación de contenidos locales, la digitalización de las colecciones y su acceso en red es una de las mayores demandas a satisfacer ·         Los sectores de población jubilada y mayor están creciendo y pueden ser un grupo de usuarios destinatario de programas de lectura y de alfabetización informacional, así como de actividades atractivas (clubes de lectura, conferencias, exposiciones, etcétera) ·         El crecimiento de la información y el desarrollo tecnológico incrementa el valor de la formación permanente y de las habilidades de búsqueda de información. Muchos colectivos de usuarios necesitan alfabetización digital y formación en las redes sociales ·         La disposición de fondos únicos y colecciones locales que pueden difundirse y explotarse a partir de su digitalización y creación de colecciones digitales enfocadas a los diversos ciclos educativos ·         Preservación y gestión de la memoria digital ·         Emigrantes y desempleados pueden encontrar en la biblioteca pública recursos de formación y espacios para buscar información ·         La incorporación de servicios de información laboral, autoformación y alfabetización informacional en las bibliotecas. Las necesidades crecientes de  formación no formal y aprendizaje permanente en la sociedad

 

Fuentes consultadas

(2014) Estudio Nacional de Sueldos y Rotación de Empleo en el Sector TI: Informe final. [En línea] México. P. 46. Disponible en https://prosoft.economia.gob.mx/.../Estudios%20Prosoft/AREF_07.pdf [Consultado el 20 de septiembre de 2015]

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[1] (2014) Estudio Nacional de Sueldos y Rotación de Empleo en el Sector TI: Informe final. [En línea] México. P. 46. Disponible en: https://prosoft.economia.gob.mx/.../Estudios%20Prosoft/AREF_07.pdf [Consultado el 20 de septiembre de 2015]